Mensaje P. Tony Salinas

martes, 28 de mayo de 2013
Al Encuentro de la Palabra…en el Año de la Fe
“Caía la tarde…” (Lc 9,11-17- Solemnidad del Corpus Christi)

            A través de estas celebraciones que desarrollan el Año Litúrgico y acompañan la vivencia del Año de la Fe, podemos decir: “Creo en la presencia real de N.S. Jesucristo en el Sacramento del Altar”. El mismo Señor está también presente en la comunidad cristiana, que es su Cuerpo. En la Eucaristía hacemos memoria de la vida de Jesús: se entregó a todos, como se parte y comparte el pan común; dio su vida por los hombres, como se derrama el vino en la copa de un banquete de hermanos. Con la primera lectura de este domingo (Gn 14,18-20) se relata el encuentro de Melquisedec, sacerdote del Dios Altísimo que alimenta y bendice al patriarca Abrahán, quien a su vez le honra, ofreciéndole víveres y bienes para sus acompañantes. El intercambio generoso de gestos  de hospitalidad  es signo distintivo de los pueblos del Antiguo Oriente. La primera de las muestras  de respeto a una persona es recibir la comida y el alojamiento que tenga a bien ofrecer a sus visitantes. En esta óptica podemos ubicar el gesto de la multiplicación de los panes. Jesús acoge a la gente en Betsaida, los hospeda, los alimenta  y a diferencia de sus discípulos que pretenden despedirlos con las manos vacías, los instruye y sacia su hambre. Jesús se acoge al Padre providente, recibe  los dones que sus discípulos le entregan y remedia su necesidad. El gesto anticipa la decisión suprema que cumplirá en su última pascua, entregando su existencia sin fisuras, en la amorosa donación de su cuerpo y sangre.
            Lucas hace revivir conscientemente en esta multiplicación de los panes los gestos de Jesús que instituye  la Eucaristía (“tomó los panes, alzó los ojos al cielo, los bendijo, los partió y lo dio a sus discípulos”). Se pone así el contrapunto al c.6 de san Juan. Lucas por lo tanto no refiere al acto de Cristo sólo como un gesto de compasión respecto de la gente hambrienta, en el atardecer de una jornada llena de acontecimientos, aparece en la misma narración del Evangelio cuando llega el momento crucial. Jesús está delante de esos cinco panes y dos pescados y, de repente, la escena parece transfigurarse. Casi como en la transfiguración hay una sobreimpresión del rostro de Cristo y sus gestos que se convierten en los de la Última Cena. En los panes que liberan a la gente del hambre física, se vislumbra ya la promesa de otro pan, el eucarístico, que liberará al hombre de toda hambre, llevándolo a la comunión plena y perfecta con Dios.
            Siguiendo la trayectoria de Melquisedec y de los panes del desierto llegamos, así al centro de esta solemnidad, la Última Cena pascual, la realidad que da sustancia a los signos. Pablo escribiendo a los cristianos de Corinto (11,23-26), une su celebración eucarística al evento decisivo de esa tarde cuando Cristo sobre el pan ázimo y sobre la copa del ritual judío de la Pascua pronunció esas palabras sorprendentes: “Esto es mi cuerpo… Este cáliz es la nueva alianza en mi sangre”. Es significativo que Jesús haga alusión a la “nueva alianza” anunciada por Jeremías (31,31-34).

            Para finalizar, no hay cosa mejor que leer lo que santo Tomás de Aquino escribió al respecto: “No existe sacramento alguno más saludable que éste, ya que en él se purifican los pecados, se acrecientan las virtudes, y la mente queda ungida de la abundancia de todos los espirituales carismas. En la Iglesia se ofrece por vivos y muertos, para que a todos aproveche, ya que por la salvación de todos fue instituido”. 

0 comentarios:

Radio Catolica

Descarga nuestra aplicación

Blogueros con el Papa

Vistas de página en total

Visitas


contadores

gif maker

Clic más Información

Visita Nuestro Blog

picasion.com

Comentario Palabra de Dios

picasion.com

Leccionario para Matrimonio

El Evangelio meditado
El alimento que permanece para la vida eternaEl alimento que permanece para la vida eterna
Juan. 6,22-29. Pascua. Ayúdame Señor a buscarte a Ti como único alimento que permanece para la vida eterna.
Contenido provisto por:
Catholic.net
El Santo de hoy
El Santo de hoyBasilisa y Anastasia, Santas
Nobles romanas mártires, 15 de abril
Contenido provisto por:
Catholic.net
Reflexión para hoy
Anclado en la esperanzaAnclado en la esperanza
A veces quedamos anclados en el pasado, inmovilizados por la pena ante lo sucedido. Una y otra vez nos lamemos la herida.
Contenido provisto por:
Catholic.net
Tema Controvertido
Tú, yo, ¿adoramos al Señor?Tú, yo, ¿adoramos al Señor?
Texto completo de la homilía del Santo Padre Francisco del III Domingo de Pascua en la Basílica de San Pablo Extramuros. 14-04-2013
Contenido provisto por:
Catholic.net

Traductor

Entradas populares

Contribuyentes

Buscar este blog