Mensaje P. Tony Salinas

martes, 30 de octubre de 2012

Al Encuentro de la Palabra…en el Año de la Fe.
“SHEMA” (Mc 12,28-34 – XXXI Domingo del Tiempo Ordinario)

            Al igual que ayer, la comunidad eclesial formada por los discípulos y los testigos del Resucitado, encuentra en este domingo un tema clave en el ejercicio de su seguimiento cotidiano por el camino de la vida en la que encuentra al mismo Jesús. La Iglesia, semejante al “ciego curado”, ahora empieza a ver como es que se debe ser alguien que quiera estar y vivir con el Maestro. Superando el mero cumplimiento de normas y preceptos que pierdan de vista lo esencial que Dios pide a todos y a cada uno de modo práctico. De aquí que la misma Iglesia, como el Israel antiguo, deberá “escuchar” para poder entender lo que Dios en verdad quiere y que es, sin duda, el núcleo de la fe verdadera.
            En este proceso de descubrimiento de la voluntad soberana de Dios, es Jesús mismo quien tomando dos textos de la Escritura, afirma en primer lugar la dimensión “vertical”, pues se refiere al amor por Dios, con el hermoso texto del Deuteronomio llamado “shema”, que constituye la primera lectura de hoy y es la oración preferida por la piedad hebrea: en tiempos de Jesús todo hebreo tenía que recitarlo por la mañana y por la tarde, mientras el texto escrito lo llevaban en una especie de relicario de cuero en las “filacterias” que llevaban en la frente y en el brazo durante la oración. “Shema” es la primera palabra del texto que significa “¡Escucha!”. Es importante entender el significado que esta forma verbal al imperativo, posee en su recurrencia por toda la Sagrada Escritura. Significa una escucha de adhesión alegre, de obediencia filial, entusiasmo por un amor pleno por Dios. Esta acción además, involucra “corazón, mente, fuerza”, es decir, todas las dimensiones del ser humano en su interioridad y en su acción.
            Luego viene la dimensión “horizontal”, que desprendiéndose del primer mandamiento está relacionado con el amor al prójimo. Aquí Jesús cita el libro del Levítico, el libro sacerdotal por excelencia: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo” (19,18). Ambos preceptos nacen de lo hondo del corazón, el lugar de las más profundas decisiones. Es desde allí que se decide entender, querer y realizar lo que Dios prescribe para que el mismo hombre no pierda la libertad y la vida. Allí está su vida y su sobrevivencia sobre la faz de la tierra. Es de tal magnitud la propuesta hecha para la vida, que ahora podemos comprender el por qué se requería para no olvidarlo “escribirlo en muchas partes” (puertas, en los brazos, etc.) símbolo todo ello de la primacía de la Palabra y la persona del Señor en la vida de su creyente.
            En el Año de la Fe que recorremos, la página evangélica narra para invitarnos a todos nosotros, a participar de un “feliz encuentro”, entre el Maestro y uno que era a su vez también maestro” en los caminos hacia Dios. Aquel hombre lanza la “pregunta más importante para un creyente”. De allí que él “No está lejos del Reino de los cielos”. Encaminándonos hacia el final del año litúrgico, vale la pena que al final de la reflexión de este domingo nos preguntemos: ¿Tenemos siempre presente lo principal en nuestras relaciones para con Dios y los hermanos? ¿Nuestro amor al Dios único se traduce en el abandono de los ídolos que quieren ocupar nuestro corazón, mente, fuerzas, hasta convertirse en estructuras de pecado que prescinden de Dios y oprimen al hermano (materialismo, tecnicismo, hedonismo, individualismo)? Nuestra participación en la Eucaristía ¿es consciente de que ella representa y urge el cumplimiento del precepto del amor?

0 comentarios:

Radio Catolica

Descarga nuestra aplicación

Blogueros con el Papa

Vistas de página en total

Visitas


contadores

gif maker

Clic más Información

Visita Nuestro Blog

picasion.com

Comentario Palabra de Dios

picasion.com

Leccionario para Matrimonio

El Evangelio meditado
El alimento que permanece para la vida eternaEl alimento que permanece para la vida eterna
Juan. 6,22-29. Pascua. Ayúdame Señor a buscarte a Ti como único alimento que permanece para la vida eterna.
Contenido provisto por:
Catholic.net
El Santo de hoy
El Santo de hoyBasilisa y Anastasia, Santas
Nobles romanas mártires, 15 de abril
Contenido provisto por:
Catholic.net
Reflexión para hoy
Anclado en la esperanzaAnclado en la esperanza
A veces quedamos anclados en el pasado, inmovilizados por la pena ante lo sucedido. Una y otra vez nos lamemos la herida.
Contenido provisto por:
Catholic.net
Tema Controvertido
Tú, yo, ¿adoramos al Señor?Tú, yo, ¿adoramos al Señor?
Texto completo de la homilía del Santo Padre Francisco del III Domingo de Pascua en la Basílica de San Pablo Extramuros. 14-04-2013
Contenido provisto por:
Catholic.net

Traductor

Entradas populares

Contribuyentes

Buscar este blog